sábado, 10 de diciembre de 2011

No dejes nunca


No dejes nunca que nadie sea más referencia ni autoridad para ti que tú mismo. No dejes nunca que te derriben sin argumentos. Aún menos, un sentimiento. No dejes nunca que alguien que no ha vivido lo que tú vives te diga que lo que sientes no tiene sentido. No se te ocurra creer al martes cuando dice que es jueves, ni hacer caso a la tortuga de Sabina cuando te dice que corras; ella no sabe lo que es la velocidad. No dejes nunca que aquellos que te advierten sobre lo que no han descubierto, te impidan llegar a ese mismo descubrimiento. Ignora si te advierten que la tierra virgen es de arenas movedizas, ¿quién la ha pisado?
Tomad nota: no hagáis caso a la gaviota que os dice que no podéis nadar, ni al pez que no podéis respirar. No escuchéis al anciano cuando os diga que no debéis correr. Aunque el anciano sea un anciano y sea en vuestra vida la primera vez que oís a un pez y una gaviota pronunciar algo.


No permitas que nadie te dibuje sus límites en tu dibujo, ni que te imponga sus reglas en tu juego. No permitas que te enjaulen en tu propio cielo. En tu único cielo.
Quienes no llegaron hasta tu horizonte te dirán que no existe. Jamás te des la vuelta ni te cubras con las manos los ojos para evitar verlo.

2 comentarios:

  1. Ohhh! yo tampoco sabía que tenías blog, bueno, tu y yo tenemos nidos!!!!
    :D

    Yo tmb te sigo desde ahoramismo! ;D

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  2. Jajaja
    La verdad es que sí! Ambas tenemos nidos :D
    Fue una sorpresa muy agradable :)

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